Con mucha tristeza y nostalgia, nos despedimos de la Fundación, pero antes, siempre habremos de recordar a aquellos que con su compromiso y disciplina nos hicieron cada día personas mejores. Nunca olvidaremos a aquellos profesores que marcaron nuestra vida, a esos que con sus correcciones, sus clases, nos abrieron los ojos a lo que es el bien, a lo que es el actuar correctamente en un mundo en el que las trampas están en todo lado, no dejaremos que nuestros corazones se priven de recordar con amor a los maestros que nos acompañaron desde el primer grado, tampoco a quienes nos acogieron con toda la disposición para enseñarnos.
Tampoco nos veremos capaces de menospreciar a aquellos que iluminaron nuestras mentes, la llenaron, y trataron de sacar su potencial cada día. Tendremos con nosotros que, aquellos profesores que tuvimos, son estrellas que iluminarán siempre a jóvenes con el hecho de haber enseñado a hacer el bien, y de pensar no como el resto, si no como debe ser.
La Fundación es un lugar que se recordará con mucho cariño, se crea una sonrisa en nuestros rostros con solo pensar en las formaciones de la mañana, en esos lugares donde más compartimos con nuestros compañeros y amigos, los salones por dónde comenzamos, y los salones que vieron nuestra última estadía en el colegio. La Fundación, a pesar de que ya no estemos siendo parte de ella, seguirá siendo nuestro hogar, es allí donde nos formamos para afrontar el hoy, pensar en el mañana, y estar conscientes de cada paso que demos. Nos brindaron algo único, el espacio en dónde convivimos tanto tiempo, es verdaderamente un privilegio del cual pudimos disfrutar y también gozar.
Nos sentimos todos honrados de ser parte de esta gran familia, nos sentimos orgullosos de haber sido estudiantes de la Fundación, y estamos muy agradecidos con las enseñanzas dadas, con los valores inculcados y con aquellos que vimos como ejemplos de grandes personas. A pesar de no estar más al lado de ustedes, siempre estaremos dispuestos, como exalumnos, a dar lo mejor como seres, y poner en alto aquellas cualidades que nos fueron impartidas.
Gabriel Farias
Personero 2020
